Calcular el rendimiento energético de un edificio

El rendimiento energético describe la cantidad de energía que consume un edificio al cabo del año. Este consumo de energía dependerá de la calidad de la construcción, del aislamiento de sus equipos energéticos y de su modo de funcionamiento. Mejorar el rendimiento energético de un edificio equivale a reducir el consumo de energía para obtener un óptimo confort del usuario ¡Te lo contamos todo!

A la concienciación creciente de empresas y particulares se suman medidas de las administraciones, que establecen incentivos económicos, subvenciones e imposiciones normativas para mejorar la eficiencia energética.

Minimizar la cantidad de energía consumida para satisfacer las necesidades específicas es lo que se conoce como eficiencia energética, esencial para lograr un mundo más sostenible. La tendencia actual en construcción es la de construir edificios de bajo consumo energético, tal y como recomienda la Directiva Europea 2010/31/UE. Un edificio con clasificación energética tipo A puede consumir hasta un 40-50% de energía menos que un edificio convencional.

En la eficiencia energética de edificios y viviendas intervienen muchos factores, todos ellos relacionados con la energía y el confort, como pueden ser la calefacción, climatización, el sistema de agua caliente sanitaria, ventilación o iluminación. De tal manera que se puede decir que un edificio es eficiente cuando se encuentra dentro de unos parámetros conocidos como clasificación energética, parámetros que indican el nivel de eficiencia de una vivienda.

Medición de la eficiencia energética de un edificio

La eficiencia energética de un edificio se calcula midiendo la energía que se consume en condiciones normales de uso y ocupación en cuanto a:

• Calefacción de la vivienda
• Agua caliente sanitaria
• Iluminación de la habitación
• Sistema de refrigeración
• Electrodomésticos
• Dispositivos auxiliares

El objetivo es reducir el consumo energético del edificio sin reducir el nivel confort del usuario. El consumo energético representa el 75% de las emisiones de la UE, por lo que la transformación de nuestro sistema energético es fundamental para nuestras ambiciones climáticas.

Según los últimos datos publicados, un 80% de los edificios en España son enérgicamente ineficientes y son responsables, aproximadamente, de un 40% del consumo de energía y de un tercio de las emisiones de CO2. En el ámbito europeo, son ineficientes entre un 70% y un 90% de los edificios.

El Ministerio de Industria, Energía y Turismo del Gobierno de España, establece que para determinar la eficiencia energética de un edificio hay que calcular el consumo de energía necesaria para satisfacer anualmente la demanda energética del edificio en unas condiciones normales de funcionamiento y ocupación.

Normalmente, los datos expresan unos valores finales de consumo de energía medidos en kilovatios hora por metro cuadrado (kWh/m2 x año) y en kilogramos de CO2 por metro cuadrado de vivienda (kg CO2/m2 x año), los cuales se corresponden con una letra de la escala de eficiencia energética, que diferencia entre 7 valores distintos para definir los edificios de mayor a menor eficiencia.

En función a los resultados que obtenga la vivienda se realizará el certificado energético que establece cómo de eficiente es un edificio o vivienda mediante una letra de calificación. Como hemos comentado, esta escala establece 7 valores distintos, expresados de la “A” a la “G”, donde una vivienda con clasificación energética “A” es aquella con mejor eficiencia energética y “G” aquella ineficiente energéticamente.

Las diferencias en el consumo energético entre las diferentes letras de calificación son considerables, una vivienda eficiente con clasificación energética A, consume hasta un 90% menos de energía que una con la letra G. Una de tipo B consumirá en torno al 70% menos y la de clase C, hasta un 35% menos.

Actualmente en España la mayoría de los edificios tienen una calificación E, F o G, de modo que estamos ante una mayoría de edificios ineficientes en términos energéticos.

Como mejorar la eficiencia energética de un edificio

Como hemos dicha anteriormente, en la eficiencia energética de un edificio intervienen muchos factores como puede ser el agua caliente sanitaria, la calefacción, la ventilación, la iluminación, etc. Por ello, son distintas las medidas que podemos aplicar cuando, a pesar de que no se vaya a llevar a cabo una rehabilitación energética integral, podamos ahorrar energía en las viviendas y lograr tener unos edificios más eficientes energéticamente:

• Mejoras en el aislamiento; aislamiento de fachadas, mejorar la envolvente térmica, cubiertas, rotura de los puentes térmicos, cambiar las ventanas, etc. supone una mejora de la eficiencia energética. Las mejoras en aislamiento pueden conllevar un ahorro de hasta un 50% de la energía consumida.
• La renovación de los sistemas relacionados con la energía: sistemas de calefacción, aire acondicionado, ventilación, iluminación o electrodomésticos.
• Otra opción es incorporar el uso de energías de origen renovable como la energía solar, la aerotermia, la biomasa, entre otros.
• Sustituir la iluminación por una de tipo LED
• Aprovechamiento de la luz natural y orientación

Cálculos térmicos de edificios

Desde la aparición del RD 47/2007 que regulaba la certificación energética de los edificios de nueva construcción, y con el nuevo RD235/2013 que incluye también los edificios existentes, la ley obliga a clasificar los inmuebles con una letra dentro de una escala. Dicha escala está relacionada con unos indicadores directamente relacionados con las emisiones de CO2.

Introduciendo los datos relativos al inmueble a certificar en el software de certificación, lo compara con un edificio de referencia de similares características al edificio objeto de cálculo, obteniendo unos valores finales que se corresponden con una LETRA de la Escala:

El proceso de cálculo de los indicadores que determinan la LETRA continúa. El siguiente paso se denomina desnormalización. Los valores o indicadores finales, que aparecen en la calificación de CE3X o en la Etiqueta Energética, se refieren a:

• Consumo de Energía en kWh/m²
• Emisiones de CO2 en KgCO2/m²

Se trata de comparar emisiones de nuestro edificio, el que estemos certificando, con un “edificio objetivo o tipo” con similares características.

Mediante el proceso de cálculo del software, se obtiene el cociente de los indicadores. A estos valores se les denomina IEE o Indicadores de Eficiencia Energética. Estos valores nos servirán para determinar la LETRA de Calificación correspondiente para cada indicador

El diagnóstico de rendimiento energético es un elemento obligatorio para las viviendas en venta desde el mes de noviembre de 2006, y para las viviendas en alquiler, desde el mes de julio de 2007.

Ahora es el momento decisivo para cumplir nuestro compromiso en el marco del Acuerdo de Paris, en interés de la salud y el bienestar de todos. La UE ha dado ejemplo al establecer objetivos ambiciosos para reducir las emisiones netas al menos un 55% de aquí a 2023 con respecto a 1990 y convertirse en el primer continente climáticamente neutro de aquí a 2050.