Cuando queremos acometer una reforma de la vivienda, una instalación importante en la que tenemos que pensar es en el sistema de calefacción. Para estos casos, el sistema de calefacción por suelo radiante es uno de los métodos más eficientes energéticamente hablando, para calentar la casa, ya que el calor se distribuye de forma uniforme por toda la habitación.
Instalar suelo radiante es una de las mejores decisiones que podemos tomar para nuestra casa y nuestro propio bienestar. En efecto, es una forma de calentar nuestra casa mucho más natural y saludable, porque el calor viene de abajo a arriba, emitiendo el calor fundamentalmente por radiación. Ello nos da una sensación de confort envolvente inigualable y actualmente hay soluciones interesantes de calefacción por suelo radiante para el caso de reforma o rehabilitación.
Los sistemas de calefacción de suelo están compuestos por una instalación de red de tuberías por las que circula agua caliente o fría, empotradas en una placa de hormigón, la cual constituye el elemento emisor de temperatura, formando parte integrante del edificio. Es uno de los sistemas más eficientes con los que podemos contar para acondicionar nuestro hogar.
Como el sistema de suelo radiante se instala directamente debajo del acabado del suelo de la estancia, tiene impacto en la altura del suelo. En muchos casos esta elevación no tiene una importancia excesiva, pero en ciertas instalaciones es primordial no perder altura disponible en la habitación.
Este tipo de sistemas puede conseguir la temperatura deseada, tanto en invierno como en verano, de forma homogénea en toda la casa. Esto garantiza un mayor confort si lo comparamos con otros sistemas de calefacción y acondicionamiento.
Actualmente, hay variedad de sistemas, abarcando desde sistemas especiales de capa delgada hasta sistemas secos sin inercia. De esta manera se disponen de soluciones óptimas para cualquier necesidad, tanto para edificios nuevos como para rehabilitación.
Sistema de placa de tetones con mínimo espesor
Panel aislante moldeado en EPS (Poliestireno Expandido) según la norma UNE-EN 13163, con un acabado superficial termoconformado de 550 µm. Las características de este protector y de los «tetones», anchos y muy resistentes, confieren al panel capacidad para responder a condiciones de superficie con gran circulación de paso.
Es el sistema que más se adapta a la rehabilitación de edificios ya que integra la calefacción por suelo frío/calor con un espesor mínimo, pudiéndose instalar sobre el suelo existente lo que posibilita la instalación en cualquier vivienda con sólo recortar mínimamente las puertas. Apto para solados cerámicos o tarimas flotantes.
La expansión de los sistemas radiantes y su creciente demanda está permitiendo incorporar nuevos materiales, facilitando la aplicación de este tipo de soluciones con menor impacto y coste. La innovación en morteros autonivelantes de altas prestaciones mecánicas y fraguado rápido permite hacer recrecidos de solo 0,5 -1,0 cm por encima de tubo, lo que reduce tanto el espesor como la carga (a 50 kg/m2).
Sistema de perfil bajo sin inercia
Levantar del suelo existente para colocar la instalación de calefacción por suelo radiante es muy costoso. Para evitar levantar el suelo, en el mercado hay soluciones eficientes y que necesitan poca altura.
Con el sistema de perfil bajo sin inercia no es necesario quitar el suelo que tengamos en nuestra casa. La instalación de un sistema de calefacción de perfil bajo sin inercia es rápido, fácil y limpio. Además de eficiente, ya que permite la utilización de fuentes de energía sostenibles. Sin olvidar que al no ser necesario colocar la capa de mortero, se reduce la carga del sistema a menos de 10 kg/m2. Es un sistema ideal y perfecto para viviendas con forjados de madera.
Encima de esta solución, ya puede colocarse las baldosas sin necesidad de colocar la placa de mortero. Es una opción perfecta para instalar un sistema de suelo radiante sin incrementar excesivamente el espesor suelo y perder altura en la habitación.
Al no colocar mortero, se puede llegar a reducir el tiempo total de la entrega de la obra en 5/6 semanas.
Revestimiento final
La calefacción por suelo radiante se puede utilizar debajo de cualquier tipo de suelo. La principal diferencia entre los diferentes acabados del suelo y su idoneidad para el uso con el sistema es la conductividad térmica del material utilizado, es decir, la rapidez y la eficiencia en la transferencia de calor generado a la superficie del suelo. Los mejores acabados para el suelo radiante son los pavimentos con buena conductividad, ya que se calienta más rápido, proporciona más salida de calor y es más eficiente de ejecutar.
El sistema de suelo radiante es una calefacción cálida, cómoda y se puede controlar cada habitación individualmente. La calefacción por suelo radiante se controla mediante un termostato. La tecnología en los sistemas de control permite que los sistemas de calefacción funcionen automáticamente sin necesidad de controlarlos manualmente. Un termostato inteligente no solo aumenta la comodidad general, sino que reduce el uso de energía, ya que la calefacción está encendida durante menos tiempo y solo cuando se necesita, lo que genera ahorros de costos.
La instalación de un sistema de suelo radiante/refrescante no es nada complicada. Se necesitan profesionales que lleven a cabo la instalación, pero no conlleva una obra demasiado compleja.
Los sistemas de suelo radiante / refrescante empiezan a ser una tendencia en nuestro país, aunque llevan años existiendo. Una de las razones principales para decidirnos por este tipo de instalación de calefacción o climatización es el ahorro y la eficiencia energética.
Con este post, hemos querido resolver dudas que os han podido surgir a la hora de querer instalar un suelo radiante si estáis pensando hacer una reforma en vuestra vivienda. ¡Si tienes alguna pregunta más, no dudes en contactar con nosotros!
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