En España, el uso del BIM en determinados proyectos de construcción es obligatorio desde hace ya varios años. Su adopción se hizo obligatoria poco después de su entrada en el mercado de la construcción, ya en 2018 debía implementarse en cualquier proyecto de construcción que tuviese algún tipo de financiación pública. A mediados de 2019 se hizo obligatorio en todos los proyectos de construcción de infraestructuras del sector público. Y desde 2020 debe observarse el BIM en cualquier equipamiento e infraestructura pública. Tanto de obra nueva como de rehabilitación. Por eso, todos los profesionales de la construcción tienen que saber tanto qué es el BIM como las ventajas y novedades que aporta a un proyecto de construcción. ¿Quieres sabes cómo se usa el BIM en un proyecto de edificación? Descúbrelo a continuación.
¿Qué es el BIM?
BIM es un sistema de trabajo que significa Modelado de información de construcción (Building Information Modeling), que tiene como fin poner en marcha la gestión colaborativa en los proyectos de edificación. Entre otras cosas, este sistema da la oportunidad, a quienes lo apliquen, de organizar y gestionar todo tipo de datos e información relacionados con un proyecto con todos sus detalles. Desde la fase de diseño hasta la de mantenimiento una vez terminadas las obras. Por supuesto, cubre todo lo relacionado con el periodo y la fase de construcción del proyecto.
De esta manera se evita la pérdida de información o de recursos por falta de organización y claridad. Esto incide también, de manera directa, en el tiempo que se tarda en ejecutar el proyecto. En efecto, si se tarda menos en localizar una información concreta cuando se necesita, quienes esperan indicaciones según dicha información tendrán que esperar menos tiempo para poder realizar su trabajo. Por eso, terminarán antes.
Para sacar partido a la metodología BIM se emplean una o varias herramientas software y plataformas de modelado específicas para el modelado de construcciones en 3D en tiempo real. Esto hace que durante el desarrollo del proyecto se pueden realizar simulaciones para ver cómo quedará el proyecto una vez ejecutado. Así, tanto los clientes como el equipo implicado en el desarrollo del proyecto podrán hacer los cambios necesarios para que todo quede a su gusto incluso antes de comenzar con la construcción.
El uso del BIM en un proyecto de construcción también ayuda a tener claros sus puntos más importantes, y las áreas en las que hay que reforzar sistemas y emplear materiales de uno y otro tipo. Así se reducen los fallos por no tener clara la información, por ejemplo, del terreno. Si está todo claro y se sabe dónde hay que emplear técnicas y materiales determinados para que la construcción sea más resistente, se evitan muchos trabajos de remodelado posteriores. Por lo tanto, consigue que ahorres dinero.
Uso del BIM en la construcción
El uso del BIM y su adopción en proyectos de edificación y construcción permite al equipo de diseño y ejecución de todo lo relacionado con el proyecto, contar con todo tipo de detalles e información sobre él, en un único punto. Gracias a ello, los implicados en un proyecto reducen la posibilidad de cometer errores, y logran facilitar el trabajo diario en él.
Con el BIM no es necesario que todos los implicados en un proyecto puedan acceder a la información completa sobre él. Es posible establecer distintos permisos y otorgar a cada uno diferentes privilegios de usuario. De esta manera, cada participante en el proyecto solo tendrá acceso a la información que realmente necesite conocer para desempeñar sus tareas. De esta manera se evita que alguien pueda ver datos que no le corresponde ver, y situaciones que lleven a equivocaciones y malos entendidos.
Con todo esto, queda claro que otro de los beneficios del uso del BIM en la construcción es una mejora en la productividad de los equipos de diseño, gestión y ejecución de los proyectos. Y por supuesto, su puesta en marcha en proyectos de construcción, aunque no sea en los que ya es obligatorio, permite evitar conflictos y pérdidas de tiempo. Otra de sus ventajas, al reducir los tiempos de ejecución y los equívocos, es que consigue rebajar los presupuestos de gastos. En efecto, un proyecto que utilice BIM consumirá menos recursos, pero tanto económicos como de gestión y personal.
Los proyectos de construcción que utilicen BIM estarán terminados antes, y su ejecución afrontará menos inconvenientes. La mejora de la gestión y organización de la información contribuirá a suavizar los procesos, y agilizará la comunicación entre los distintos equipos de trabajo.
Este es el papel y uso del BIM en los proyectos de construcción y edificación. Como puedes ver, utilizar esta metodología, y hacerlo no solo en los proyectos en los que es obligatoria, aporta muchas ventajas. Por eso, utilizarlos en proyectos de edificación, tanto de construcciones nuevas como en reformas, facilita y agiliza el trabajo, y mejorar los procesos. Así que, si estás implicado en el desarrollo y gestión de proyectos de construcción, ¡Incluye la metodología BIM en ellos desde sus primeras etapas de diseño!
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