El gas es una de las principales fuentes de energía, y destaca por ser económico y eficiente. Suele usarse en muchos hogares para cocinar, en la calefacción, o para el agua caliente. Por ello, debido a su importancia en nuestro día a día, es conveniente realizar un buen mantenimiento del sistema para garantizar las correctas conexiones de gas. De hecho, descuidar el cuidado de dichas conexiones y su funcionamiento puede acarrear problemas para el hogar, e incluso para la salud.
Acciones preventivas para asegurar las conexiones de gas
Tener una fuga de gas en el hogar supone un peligro potencial que puede tener como consecuencia accidentes graves, como explosiones o intoxicaciones, y que afectan tanto al hogar como a la salud de las personas que viven en él. Y, aunque el gas es considerado una fuente de energía limpia, económica y eficiente, es importante conocer ciertas medidas preventivas para evitar riesgos como los mencionados.
De igual modo, es recomendable realizar una revisión anual de los diferentes sistemas de gas, sobre todo si es una vivienda que se considera antigua. Y es que en ella puede haber tuberías y cañerías viejas que estén en mal estado y tengan que cambiarse.
En el caso de instalaciones industriales o negocios más pequeños, es bueno realizar inspecciones más frecuentes , ya que se hace un mayor uso del gas.
En definitiva, la prevención es siempre la mejor forma de evitar cualquier daño o accidente que puede costarnos muy caro.
Lista de acciones preventivas más comunes
A continuación, detallamos las acciones preventivas que deberían realizarse con una mayor regularidad.
- Comprobación de puntos de consumo. Es importante comprobar los equipos de gas (calderas, calentadores, cocinas) para asegurar que funcionan correctamente. Aquí te dejamos 6 problemas en la red de calefacción como ejemplo.
- Verificar la ventilación. Los equipos que funcionan con gas han de disponer de una ventilación correcta para evitar la acumulación gases nocivos como el monóxido de carbono.
- Inspección de conexiones de gas y tuberías. Un profesional ha de comprobar que no existan posibles fisuras, desgastes o corrosión en las tuberías del sistema.
- Hermeticidad. Se hacen distintas pruebas para valorar si existen escapes y, en caso de ser así, se reparan o se sustituyen las piezas afectadas.
- Utilización de detectores de gas. Es conveniente instalar detectores de gas en ciertos puntos clave, como son la cocina o el cuarto de calderas. Ayudan a detectar cualquier fuga de gas, y lanzar un aviso sonoro o luminoso, para actuar antes de que suceda un accidente.
- Control de presión del gas. Hay que comprobar que la presión de gas sea la adecuada, ya que una presión muy baja o demasiado alta puede provocar que el funcionamiento de los aparatos se resienta.
- Tratamiento en caso de corrosión. Las instalaciones de gas pueden sufrir oxidación y corrosión, por lo que estos tratamientos contribuyen a evitar que esto suceda, y a corregir los problemas.
Ventajas del mantenimiento de instalaciones de gas
Contar con un plan de mantenimiento de las instalaciones de gas es importante, ya que nos previene de problemas futuros que pueden afectar a nuestra producción y actividad diaria. En este sentido, los beneficios de contar con un sistema de mantenimiento son los siguientes:
- Reduce los accidentes laborales: el mantenimiento de las instalaciones de gas previene fugas, explosiones y exposición a gases tóxicos; además, asegura el cumplimiento de las normativas.
- Minimiza las pérdidas: cada vez que falla una máquina, hay que parar y no completar la cadena de producción. Por ello, tener un correcto mantenimiento permite reducir las pérdidas provocadas por la parada de las máquinas, ya que nos anticipamos a los fallos.
- Permite ahorrar costes futuros. Contar con un mantenimiento correcto, ya sea a nivel industrial o en el hogar, ayuda a que no aparezcan tantos problemas vinculados con el gas. Y esta prevención elimina el sobrecoste de tener que pagar las reparaciones y daños provocados por el gas.
- Detecta los fallos. Un plan de mantenimiento permite detectar cualquier fallo y poder repararlo antes de que afecte de forma preocupante al hogar o negocio.
- Aumenta la vida útil de las instalaciones, ya que permite que las instalaciones y las conexiones de gas se desgasten de forma más lenta.
Prevenir daños en las conexiones de gas depende, en parte, de las revisiones periódicas, de un buen mantenimiento de las instalaciones, y de la utilización de la tecnología adecuada. Desde StH esperamos haberte ayudado con todas las claves para disfrutar durante más tiempo de tu instalación de gas en perfectas condiciones.
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