Las válvulas son algunos de los componentes más importantes de un circuito o tubería de agua caliente, y también de calefacción. De hecho, son imprescindibles para el funcionamiento correcto de prácticamente cualquier circuito por el que viaje agua, y las hay de varios tipos. De todas ellas, las válvulas antirretorno están entre las más útiles y relevantes. Pero también son unas grandes desconocidas. ¿Quieres saber cómo son y cuál es su función? Lo tienes a continuación.
¿Qué es una válvula? ¿Para qué sirve?
Antes de detallar qué son las válvulas antirretorno, veamos primero qué es una válvula. Básicamente, es un componente pensado para permitir, regular o parar la circulación de gases o líquidos en un circuito. Para ello, cuenta con una o más piezas que se pueden mover a voluntad. En función del nivel de apertura, al accionar estas piezas abres el circuito para que pase el agua, lo cierras o limitas el caudal del agua o gas que vaya por él.
Las válvulas pueden utilizarse también para desviar el agua o el gas de una parte de un circuito a otra. Para ello, basta con cerrar una válvula para impedir el paso a una sección del circuito, y abrir otra cercana que dé acceso a la zona por la que quieres que pase.
Tipos de válvulas
Tal como hemos comentado, hay varios tipos de válvulas. Son los siguientes:
– Válvulas de interrupción: sirven para abrir o cerrar completamente un circuito, o el acceso a una parte del mismo.
– Válvulas antirretorno: son las diseñadas para dejar paso a líquidos o gas únicamente en un sentido. Profundizaremos en ellas más adelante.
–Válvulas reguladoras: controlan el flujo de agua o gas por un circuito. Permiten seleccionar cuánto líquido o gas quieres dejar pasar a través de un circuito. Lo conseguirás gestionando el nivel de apertura de la válvula.
– Válvulas de accionado automático: hace referencia a una mejora que se consigue añadiendo un elemento «automatizador» a cualquiera de los tres tipos de válvulas anteriores. A este elemento se le conoce como actuador, y su nombre hace precisamente referencia a su función: lograr que una válvula se abra o cierre sin intervención humana directa. Es decir, automatiza el sistema.
Función de las válvulas antirretorno o de retención
Las válvulas antirretorno o de retención se encargan de hacer que el flujo de agua o gas en una tubería se produzca en un único sentido. Están colocadas en los circuitos para impedir que el agua o el gas que va por las tuberías pueda cambiar de dirección.
Por eso, hay que tener cuidado durante su instalación. Será necesario hacerlo de manera que permitan el paso de fluido en el sentido que interesa. Por otro lado, se pueden instalar para permitir el paso de líquido o gas en horizontal o en vertical. En este último caso, las válvulas antirretorno tienen que contar con resorte; así podrán encargarse de que el fluido ascienda o descienda sin contratiempos.
Tipos de válvulas antirretorno o de retención
En la actualidad hay varios tipos de válvulas antirretorno o de retención. Entre ellos están las conocidas como válvulas de clapeta oscilante, que cuentan con una clapeta que funciona como un obturador. Están diseñadas para obstruir el paso de un fluido cuando intenta moverse en dirección contraria a la deseada. Hay que tener cuidado de instalarlas en la dirección adecuada, o el circuito no funcionará bien. Además, hay otros tres tipos de válvulas antirretorno:
– Válvulas de émbolo o pistón: su principal mecanismo es un émbolo cilíndrico o cónico. En el émbolo hay un obturador, que se apoya sobre el anillo de cierre. Cuando el fluido circula en la dirección que tiene que ir, se levanta el émbolo. Si quieres cambiar la dirección del fluido en las tuberías, el émbolo tiene que situarse sobre el anillo. Funciona gracias a la acción de la gravedad o según el modelo con la ayuda de un muelle, así que hay que tener cuidado para instalarlo en la posición correcta.
– Válvulas de muelle: a diferencia de las válvulas de clapeta y pistón, no funciona por acción de la gravedad, así que se puede colocar en distintas posiciones. Las hay con dos sistemas de funcionamiento. Las primeras tienen un muelle con cierto grado de rigidez que sostiene un obturador. Este, a su vez, está sobre el anillo que cierra la válvula. Cuando llega el líquido, su presión vence la resistencia del muelle y el líquido fluye. Las válvulas de muelle del segundo tipo tienen dos clapetas semicirculares que se mueven sobre un eje y, si están en línea, no dejan pasar el líquido. Un muelle en la válvula controla su posición.
– Válvulas de retención de bola: son para bombas empleadas en extracción de agua en pozos o conducciones parecidas. Para que funcione, en el anillo que cierra el paso al líquido se pone una bola. Para sacar agua del pozo, la bola se levanta y se desplaza a un lado; así, el agua sube. Al parar la bomba, la bola vuelve a su sitio.
Esto es todo lo que necesitas saber sobre las válvulas antriretorno en particular, y sobre las válvulas en general. Así que si quieres poner en marcha una tubería para tu conducción de gas o agua, ¡ya sabes qué válvulas instalar para que solo fluya en un sentido!
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